Las unidades de medición inercial (IMU) son componentes fundamentales de los modernos sistemas de navegación y seguimiento del movimiento.
Una unidad de medición inercial (IMU) es un dispositivo electrónico que mide e informa de la fuerza específica de un cuerpo, su velocidad angular y, a veces, el campo magnético que lo rodea, mediante una combinación de acelerómetros, giroscopios y, en ocasiones, magnetómetros.
Las IMU son fundamentales para rastrear y controlar la posición y orientación de diversos objetos, desde aviones y barcos hasta smartphones y mandos de juegos.
Existen distintos tipos de sensores IMU : los basados en FOG (giroscopio de fibra óptica), las IMU RLG (giroscopio láser de anillo) y, por último, las IMU basadas en tecnología MEMS (sistemas microelectromecánicos). Esta tecnología permite abaratar costes y reducir las necesidades de energía, al tiempo que garantiza el rendimiento. Por tanto, los sistemas basados en MEMS combinan un alto rendimiento y una potencia ultrabaja en una unidad más pequeña.
El sistema emite datos brutos a 1KHz para aplicaciones exigentes en tiempo real.
¿Cómo elegir la mejor IMU ?
A la hora de elegir la mejor IMU para sus necesidades, hay que tener en cuenta varios factores para garantizar una gran precisión, fiabilidad y rendimiento. El primer factor es la precisión del sensor, que influye directamente en la precisión de las mediciones.
Las IMU de alta calidad tienen un bajo sesgo, deriva y ruido, lo que garantiza que los datos que proporcionan son precisos y estables a lo largo del tiempo. La calibración también es crucial, ya que los sensores bien calibrados minimizan la acumulación de errores, especialmente en entornos dinámicos.
El alcance y la resolución de los sensores de IMU IMU también son importantes. Dependiendo de su aplicación, puede necesitar una IMU con un amplio rango dinámico para manejar condiciones extremas, o una con alta resolución para mediciones precisas en movimientos más pequeños.
El consumo de energía es otra consideración crítica, especialmente para los sistemas que funcionan con baterías, como los drones y los vehículos autónomos. Una IMU de bajo consumo amplía el tiempo de funcionamiento y reduce los costes energéticos, lo que la hace más eficiente para misiones de larga duración.
La durabilidad es esencial. Las IMU diseñadas para entornos difíciles, como los utilizados en defensa o en el sector aeroespacial, deben ser lo suficientemente resistentes como para soportar fluctuaciones de temperatura, vibraciones y golpes. Además, hay que tener en cuenta el factor de forma y la compatibilidad de integración.
Las IMU más pequeñas y ligeras funcionan mejor para dispositivos portátiles o sistemas no tripulados, mientras que para aplicaciones más robustas se requieren sistemas más grandes.
Por último, elegir un fabricante de confianza con un historial probado en el suministro de IMU de alto rendimiento garantiza que obtendrá un producto fiable que satisfaga sus necesidades de seguimiento preciso y exacto del movimiento.